En un giro sorprendente, la delegación de paz del Ejército de Liberación Nacional (ELN) ha negado categóricamente las acusaciones de la Fiscalía sobre un supuesto plan de atentado terrorista contra el fiscal Francisco Barbosa. En un comunicado difundido a través de su cuenta de Twitter, la instancia guerrillera calificó la información proporcionada por el ente acusador como "falsa" y acusó a la Fiscalía de mentir al respecto.
La delegación de paz del ELN asegura que estas acusaciones forman parte de un intento de sabotear el proceso de diálogo en curso. Destacaron que la divulgación de esta noticia coincidió con la instalación de la instancia de participación de la sociedad en el proceso de paz y cese al fuego. Además, señalaron que la Fiscalía hizo pública la imputación de cargos contra Nicolás Petro, hijo del presidente, en un momento estratégico para distraer la atención y perjudicar el avance de las negociaciones.
La reacción del ELN no se hizo esperar. Publicaron una imagen del comunicado de la Fiscalía con el rótulo de "falso" y el hashtag "Fiscalía miente". La guerrilla argumenta que la difusión de esta falsa noticia por parte de algunos medios de comunicación solo empeora la situación en el país y dificulta la búsqueda de soluciones.
Por su parte, la Fiscalía basa sus alegaciones en fuentes de información provenientes de las Fuerzas Militares, el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) y la Policía Judicial. Afirman que hubo una reunión en Venezuela entre altos mandos del ELN en la que se discutió la realización de un atentado con francotiradores bajo la dirección de alias "el Rolo". Las transacciones financieras sospechosas cercanas a este individuo también levantaron sospechas y evocaron similitudes con el atentado contra la Escuela de Policía General Santander.
Mientras tanto, Otty Patiño, jefe negociador del Gobierno en los diálogos con el ELN, informó que el supuesto atentado no fue discutido en la Junta de Inteligencia Conjunta, donde participan altos funcionarios de inteligencia de la Policía y el Ejército. Patiño subrayó la gravedad de cualquier atentado y destacó que, si resulta ser cierto, constituiría una violación al Derecho Internacional Humanitario (DIH).
En medio de las acusaciones cruzadas y las declaraciones contradictorias, la incertidumbre rodea la situación. Las negociaciones de paz y la verdad detrás de estas alegaciones continúan en el centro de la atención nacional e internacional.
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